Faqs

Las fuentes de energía renovables son aquellas que se regeneran naturalmente o que son inagotables, como el sol, el viento, el agua y la biomasa. Las no renovables son limitadas y se agotan con el uso, como el petróleo, el carbón y el gas natural.

La energía limpia es aquella que produce pocos o ningún subproducto dañino para el medio ambiente, lo que incluye tanto fuentes renovables como algunas formas de energía nuclear. La energía verde es un subconjunto de la energía limpia que excluye todas las fuentes que impactan de forma negativa en el medio ambiente, enfocándose exclusivamente en las renovables.

La energía solar funciona mediante la captura de la luz del sol con paneles solares. Estos paneles contienen células que pueden convertir la luz en electricidad, un proceso conocido como efecto fotovoltaico.

La energía eólica, aunque es una fuente de energía renovable y no produce emisiones, puede tener impactos ambientales en términos de ruido y en la fauna local, particularmente en las aves y murciélagos.

La eficiencia energética se refiere a usar menos energía para realizar la misma tarea. Es importante porque nos ayuda a ahorrar recursos, reducir la demanda de energía y disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero.

El futuro de los combustibles fósiles es incierto debido a la creciente preocupación por el cambio climático y la transición hacia fuentes de energía más limpias y sostenibles.

Los individuos pueden contribuir a la transición energética de diversas maneras, como reduciendo su consumo de energía, utilizando energía renovable, invirtiendo en eficiencia energética y apoyando políticas y empresas que están alineadas con un futuro energético sostenible.

La energía nuclear es la energía liberada durante la fisión o fusión de núcleos atómicos. En las centrales nucleares actuales, se utiliza el proceso de fisión, en el que un neutrón golpea el núcleo de un átomo de uranio, haciendo que se divida y libere una gran cantidad de energía.

La biomasa es la materia orgánica que se utiliza como fuente de energía. Los biocombustibles son combustibles líquidos producidos a partir de la biomasa, como el biodiesel o el bioetanol.

La producción de energía es uno de los mayores contribuyentes al cambio climático. Esto se debe principalmente a la quema de combustibles fósiles, que libera grandes cantidades de dióxido de carbono, un gas de efecto invernadero, en la atmósfera. La transición a fuentes de energía más limpias y renovables es fundamental para combatir el cambio climático y reducir nuestro impacto en el medio ambiente.